No alcanza ser buena gente, deben estar preparados políticamente...

(por la causa que sea); transmitiéndoles, no sólo lo bueno, sino lo malo de su experiencia, conocimiento y referencias. Tal es así que si faltan estos viejos políticos, empezamos a preocuparnos: "si, es verdad, no son lo mejor, pero, sino los votamos ¿a quién? No hay nadie mejor"... Nos cansamos de escuchar frases como estas y al momento del sufragio, más vale malo conocido... Prever requiere tres cosas: mirar el pasado para no volver a repetir los errores cometidos (imitando lo bueno), mirar el presente para tomar lo bueno de una gestión (sin olvidar lo malo), mirar el futuro, para saber dónde llegaremos siguiendo el camino que estamos transitando (y poder entender dónde tenemos que cambiar, y que podemos cambiar, si queremos llegar a otro lado). Somos el producto del ayer. Sino empezamos a preparar a nuestros líderes hoy, nuestros hijos y nietos, de acá a 30 años, seguirán tomando la mismas decisiones que nosotros; al momento de elegir votarán por: "lo mejor de lo peor"; en lo lugar de por lo "mejor de lo mejor". Con la educación (historia, política, sociología, letras, filosofía, economía, buenos modales,...) y el respeto (por las leyes, instituciones, por el otro,...) se combaten muchos de nuestros males

Federico Rudolph (comentario sobre la nota de la Re re elección de Engel)

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