Será muy crítica la temporada de incendios

El cuadro que componen parte de que marzo y abril han sido muy lluviosos, lo que genera un crecimiento mayor de las pasturas serranas. Y se completa con el pronóstico de los meteorólogos: el invierno sería más seco de lo habitual y con heladas que, aunque sean cada vez menos rigurosas, serían tempranas. Entonces, altos pastos secos generan un mayor riesgo de combustión. Y la necesidad de extremar la prevención.

Con esos trazos coinciden quienes trabajan en el Plan Provincial de Manejo del Fuego. El año pasado fue uno de los peores en la historia reciente de Córdoba. Oficialmente, se calcula que fueron 121 mil las hectáreas quemadas, la mayoría de ellas en zonas de montes y pastizales de sierras.

Pero los bomberos del interior creen que la cifra real sería muy superior, si se cuentan las grandes superficies de campos cultivables, cuyos rastrojos secos tomaron fuego.

Tras el frío. Bruno Lenk es bombero voluntario y jefe de la regional 7, que agrupa a cuarteles de Calamuchita, una de las zonas críticas. “Todo dependerá de la humedad del suelo cuando llegue, hacia setiembre, el tiempo de los vientos y primeros calores. Si el invierno es muy seco, el riesgo aumentará”, señaló.

El tema es que la mayoría de los meteorólogos pronosticaban otoño lluvioso e invierno seco. Lo primero ya está ocurriendo. “Las lluvias actuales hacen crecer el pasto. Si en mayo se corta la humedad, y llueve poco y nada en invierno, llegarán los primeros calores con más masa combustible disponible y seca”, apuntó.

El período de mayor riesgo de incendios en Córdoba se suele dar entre setiembre y octubre, cuando coinciden los pastizales que secó el invierno con la llegada de los primeros calores y la temporada de mayores vientos. “Ya el año pasado los peores incendios en Calamuchita fueron a fines de agosto, porque se anticipó el calor. Los inviernos parecen cada vez más cortos”, acotó Lenk.

Coincide en el diagnóstico Javier De Olmo, jefe del cuartel de Bomberos de Río Cuarto. “Pinta para que 2010 sea más complicado aun que 2009, según las proyecciones meteorológicas que venimos haciendo”, resumió. “Se habla de nevadas tempranas, algunas ya hubo en las Altas Cumbres. Eso acelera el proceso de seca. Y el clima está cambiando; como pasó el el año pasado, cuando antes de terminar el invierno ya hacía calor, allá por fines de agosto. Vamos a tener que redoblar esfuerzos en la prevención y concientización”, planteó.

Hay coincidencia. No hay disparidad de criterio en las oficinas del Plan Provincial de Manejo del Fuego. Desde esa repartición gubernamental, Gabriel Salcedo admitió que “si los pronósticos climáticos se cumplen, será una temporada dura”.

Según marcó, ante esa circunstancia se anticipará una campaña de concientización en las zonas más críticas de las sierras. “Da la impresión de que el período de riesgo es cada vez más largo”, señaló, respecto del acortamiento del invierno del que se habla.

Desde el ámbito oficial se recordó que rige la ley que prohíbe, hasta diciembre de 2011 y en todo el territorio provincial, el encendido de fuego con ninguna finalidad, salvo en lugares autorizados o indicados.

El 6 y 7 de mayo, en tanto, habrá jornadas de capacitación para bomberos voluntarios cordobeses y en el plantel del Gobierno provincial dedicado a esta problemática. Trabajarán con especialistas del Plan Nacional de Manejo del Fuego y del Servicio Meteorológico Nacional.

Más de cinco mil voluntarios. En Córdoba, hay 149 cuarteles  de Bomberos Voluntarios, en los que participan actualmente 5.279 agentes activos, que prestan servicios ante emergencias, sin cobrar remuneración.

Palabra de meteorólogo. El meteorólogo cordobés Carlos Eschoyez confirmó lo que muchos de sus colegas vienen anticipando: que la mayoría de los pronósticos hablan de un invierno algo más seco de lo habitual. “De por sí, el invierno es seco en Córdoba. Además, cambio climático mediante, estamos viendo que son cada vez menos fríos”, señaló a este diario.

Tras la etapa pronosticada con acierto de que los meses de marzo y abril serían lluviosos, los meteorólogos hablan de que no sólo el invierno de 2010 sería seco, sino que podrían atrasar las lluvias primaverales. Si es así, los primeros calores llegarían con escasas precipitaciones y baja humedad.

Ese es el cuadro que trazan Bomberos y técnicos del Plan Provincial de Manejo del Fuego para justificar su estado de alerta.

La Voz del Interior

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