Confirmaron que los restos óseos de Cuchi Corral pertenecen a Melisa Zalazar

José Hernández
Corresponsalía

Cosquín, La Cumbre. El viernes pasado se vivió una escena desgarradora en la Fiscalía de Instrucción de Cosquín. La titular, María Alejandra Hillman, y sus colaboradores (la mayoría mujeres) no pudieron contener las lágrimas al notificar a los ancianos Nicolaza González y Carlos Ahumada el hallazgo de los restos óseos de su nieta embarazada Melisa Paola Zalazar (17), desaparecida misteriosamente cuatro años atrás, en abril de 2005.

Los restos habían sido hallados este año y los exámenes de ADN habían descartado que fueran de la chica. Sin embargo, un nuevo estudio del Ceprocor terminó por confirmar científicamente que los restos óseos son, en efecto, de Melisa. Terminaron así las largas noches sin certezas para los abuelos de la joven.

Ahora, con estos resultados, la fiscal resolvió la prisión preventiva de Leandro Martín Funes (30), ex novio de la chica. El guía de turismo está imputado de homicidio calificado por este crimen ocurrido en el barranco de Cuchi Corral, en la localidad serrana de La Cumbre. Funes cumple una condena de 14 años de prisión en la Cárcel de Cruz del Eje, acusado de haber intentado matar a su hijo menor en dos oportunidades en el mismo barranco donde se encontraron los restos de Melisa Zalazar (ver Su propia sangre...).

La fiscal sospecha que Leandro Funes, así como hizo con su hijo, empujó a Melisa en el mirador de Cuchi Corral desde la plataforma de lanzamiento de parapentes hacia un barranco de unos 400 metros de profundidad.

Hoy, el abogado defensor de Funes, Marcelo Brito, se notificará de la resolución judicial en la sede judicial de Cosquín.

"No tengo ninguna opinión al momento. En una primera instancia, la fiscal (Hillman) dictaminó la falta de mérito para mi defendido. Al parecer, ahora, algunos estudios científicos la impulsaron a otro juicio de valor", comentó el letrado.

El ex fiscal General de la Provincia, advirtió que "hay que diferenciar claramente la existencia del hecho, con el supuesto de que Leandro Funes lo haya cometido. A partir de mañana (por hoy) tenemos siete días para recurrir al control jurisdiccional, si correspondiera".

La corazonada. Los restos óseos, que según se comprobó ahora pertenecen a Melisa Zalazar, fueron hallados el 19 de junio de este año. Y ese encuentro fue producto de una corazonada del fiscal de Cámara, Hernán Funes, y de la decisión de búsqueda e investigación de la fiscal Hillman.

Ambos funcionarios, secundados por cuerpos especiales de la Policía provincial, rastrearon meticulosamente el barranco de Cuchi Corral en La Cumbre, habitual mirador de lanzamiento de parapentes. Tuvieron éxito: encontraron restos óseos de una mujer joven, al parecer embarazada, a 85 metros de profundidad.

Al mismo tiempo, los abuelos de la chica denunciaron y culparon públicamente a Funes por el homicidio. Afirmaron que introdujo a su nieta en el consumo de la droga en un boliche que era propiedad de Funes.

Estas afirmaciones fueron publicadas en la edición del 22 de abril de 2008 de La Voz del Interior , donde además se consignó que el hombre era novio de la chica y que ambos esperaban un hijo.

Según consta en los fundamentos de la prisión preventiva, dictaminada el viernes, la Policía tomó conocimiento de la desaparición de la chica recién con la nota. Habían transcurrido tres años desde que desapareció, a pesar de que los ancianos aseguraron que sus denuncias nunca fueron respondidas.

ADN. Los primeros estudios de los restos óseos habían dado negativo. La exhumación del cuerpo de la madre de Melisa y el ADN fueron lapidarios: los restos de Cuchi Corral eran de Melisa, según determinó el Ceprocor.

Un sinnúmero de testimonios probaría la relación de Funes con la chica asesinada, según el dictamen de prisión preventiva.

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