Médicos del Hospital de Urgencias enviaron una nota cuestionando al director periodístico de La Voz del Interior

Nuestra obligación moral y humana es la de salvar vidas, y para ello nos hemos preparado durante años sin dejar de actualizarnos jamás, ya que los incesantes avances científicos así lo requieren. Si nos permite recordarle, su obligación antes de escribir una nota, es la de informarse correctamente. Pues no lo ha hecho, y se lo podremos demostrar fehacientemente.

Usted escribe en su nota: “Porque si algo demuestra la experiencia es que los profesionales que ocupan cargos permanentes se burocratizan y su actualización depende de los folletos que les acercan los agentes de propaganda de los laboratorios de especialidades medicinales.”

Totalmente falso. Pero empecemos por desglosar su falacia. Dice usted: “…si algo demuestra la experiencia…”; según el diccionario de la real academia experiencia tiene varias acepciones: “Hecho de haber sentido, conocido o presenciado alguien algo” o “Práctica prolongada que proporciona conocimiento o habilidad para hacer algo”.

Nos imaginamos que usted se refiere a su experiencia. Y si no fuera así, ¿a la experiencia de quién? Ya que no recordamos haberlo visto a usted deambulando por los pasillos, las salas, los ateneos o las reuniones científicas; le preguntamos: ¿a la experiencia de quién se refiere? Pues sea cual fuere le diremos porqué está equivocado.

•        El Hospital de Urgencias es paradigma de la excelencia en la atención del politraumatizado en Sudamérica.
•        Nuestros trabajos científicos son presentados permanentemente en Congresos de Trauma, Nacionales e Internacionales, y son citados por numerosas bibliografías.
•        Tenemos una revista HUcba (que usted puede consultar on line) que se edita desde hace varios años.
•        En el Hospital funciona la cátedra de Emergentología dependiente de la Universidad Nacional de Córdoba.
•        Nuestra residencia de Segundo Nivel en Emergentología es única en el país, para ello los residentes reciben capacitación diaria a cargo del Departamento de Capacitación y Docencia.
•        Por las dudas sus “informantes” no estén al tanto, para hacer la residencia de segundo nivel se requiere haber hecho otra residencia previamente, con el tremendo esfuerzo que ello implica.
•        Recientemente el señor decano de la facultad de Medicina ha expresado como prioridades las especialidades de Medicina Familiar y Medicina de Urgencias.
•        Tenemos un ateneo central semanal, y clases diarias a los residentes.
•        Muchos de nuestros profesionales además de contar con varias especialidades y maestrías, son docentes universitarios y obviamente esto nos demanda estar actualizados en forma diaria.
•        Como usted muy bien se podrá imaginar estas maestrías y especialidades no la podemos hacer actualizándonos con “folletos” como usted injustamente proclama. Lo suyo hasta causa gracia, ya que dichos “folletos” ya casi ni existen en la actualidad.
•        Todos los años realizamos las “Jornadas de actualización en “Urgencias Médico Quirúrgicas”. Este año es en Noviembre y lo invitamos cordialmente a que vea nuestros “folletos”.
Como usted habrá podido comprobar por lo antes expuesto, “la experiencia” le ha jugado una mala pasada, o usted tiene un concepto distinto al de la real academia.
 
Mas adelante en su editorial usted continúa con sus falacias y contradicciones, hasta llegar casi al absurdo: “Son los médicos contratados los que aportan alguna renovación en conocimientos y prácticas.”

¿En qué quedamos señor Jornet?  Los médicos contratados según usted son los que aportan renovación en conocimientos y prácticas, y los pretende dejar sin trabajo. Y le explico porqué digo esto: si usted a un médico que trabajó siete años gratis (especialista) y luego 5 años precarizado como contratado y/o monotributista, lo pretende poner en igualdad de condiciones con un concurso abierto, correrá el grave riesgo de que el médico no gane el concurso (usted bien sabe que abierto no es necesariamente, sinónimo de transparencia) y que toda su tan mentada renovación se tire por la borda. Si gana otra persona… ¿qué hará con los derechos adquiridos por el trabajador contratado? ¿Lo echará luego de tanto esfuerzo? ¿O seguirá engordando la planta de personal tantas veces criticada por usted?

Ya que a usted tanto le “preocupa” la constitución, me permito recordarle parte del artículo 14 bis de nuestra carta magna: ” Art. 14 bis.- El trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de las leyes, las que asegurarán al trabajador: condiciones dignas y equitativas de labor; jornada limitada; descanso y vacaciones pagados; retribución justa; salario mínimo vital móvil; igual remuneración por igual tarea; participación en las ganancias de las empresas, con control de la producción y colaboración en la dirección; protección contra el despido arbitrario; estabilidad del empleado público; organización sindical libre y democrática, reconocida por la simple inscripción en un registro especial….”

Le preguntamos: ¿en qué editorial se preocupó usted porque tantos y tantos trabajadores, especializados y necesarios, tuvieran “igual remuneración por igual tarea”?
 
Ya sabemos que suena muy lindo al oído de la gente hacer demagogia con los “concursos abiertos” ya que ante cualquier persona desinformada puede pensar que eso es un estricto acto de justicia. Le voy a seguir demostrando cuan equivocado está ese pensamiento:

En salud hay aproximadamente 490 contratados  cumpliendo con su necesaria labor en cada uno de sus puestos de trabajo. El concurso que quieren implementar es para 48  cargos permanentes y 83 cargos transitorios. Vamos a suponer (por lo ya explicado más arriba) que ninguno de los 490 gana el concurso y entran los otros 131.

Siguiendo con el razonamiento de la señora secretaria de que ningún contratado quedará sin trabajo (recuerde que la constitución los ampara) resultaría entonces otra paradoja no buscada: un engrosamiento de la planta, que según su diario ya es excesiva. ¿En qué quedamos? ¿Respetamos la Constitución o respetamos los concursos?

Pero usted no se conforma en sus injustos agravios y continúa diciendo:” Con su actitud, el Suoem se pronuncia por el "quedantismo" clientelar y, como es habitual en sus acciones directas, niega en los hechos la atención médica a quienes más la necesitan porque menos poseen.”

Para los que diariamente trabajamos en el hospital de Urgencias no existen las diferencias de clases sociales y habitualmente atendemos a los que más nos necesitan. Pero significativamente hemos tenido casos de quienes por un simple capricho del destino han tenido medios económicos para ir a otro lugar y han preferido quedarse en nuestro Hospital.

Claros ejemplos son el corredor Ari Vatanen y el ingeniero de la escudería Skoda. Le recuerdo por las dudas usted “lo ignore”, que cuando éste último ingresó al nosocomio, hablaron desde Europa los familiares de Vatanen para decirles que ni se les ocurriera moverlo de nuestro hospital. Claro está, ellos seguramente ignoraban que nosotros nos “actualizábamos con folletos”.

De su remate endilgándonos una supuesta solidaridad de G.W. Bush, es tan burdo e insultante, que preferimos manejarlo legalmente. Eso sí, ante sus dichos de que “…aunque algunas de sus entidades asuman posiciones seudoprogresistas, impregnadas de fascistización.”, creemos que nuestro hospital habla de cosas que conoce y no utiliza medios de comunicación masiva para desinformar a la población. ¿Lo hace usted?

Por último y para no devolverle su agravio con ninguna bajeza, pensamos que necesitamos una aclaración urgente a sus dichos públicos, ya que usted ha causado un grave daño a la Institución.

Mientras tanto, puede usted dormir tranquilo, ya  que si por alguna desgracia (Dios no lo permita) usted o su familia nos necesitara, allí estaremos para brindarles nuestra ciencia y nuestra humanidad con la que siempre hemos servido a la comunidad de Córdoba.
 
Atentamente
Personal Médico del Hospital de Urgencias.

Link a editorial: http://www.lavoz.com.ar/nota.asp?nota_id=558809

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